29 de marzo de 2020

no tengo tiempo, parte 2

Este fin de semana hemos aprovechado para "ir a la playa", hemos puesto el salón patas arriba para aprovechar el sol que entra por la ventana, y con esterillas, toallas, bañador/bikini, librito y bocadillo incluído hemos estado tirados a la bartola un par de horitas. Vitamina D que no falte.

La verdad que poder disfrutar en tu propia casa es genial, y como no, ya hemos hecho limpieza de prácticamente todo, y nos hemos quitado de encima todo aquello que, o no nos hacía falta, o  nunca nos terminó de convencer.

Así que esta tarde, después de los aplausos y ya con todo recogido, me ha dado por fotografiar detalles, rincones, y compartirlas aquí. Espero que os guste, y si no no pasa nada, seguro.






















22 de marzo de 2020

no tengo tiempo, parte 1

Estamos acostumbrados al corre corre, a pasar el día de un lado a otro, arrastrados prácticamente de manera automática, a veces sin ni siquiera pararnos a pensar qué estamos haciendo ni porqué ni para qué, estamos ocupados todo el tiempo y sin embargo no tenemos tiempo para nada, y de repente, una mañana de un sábado, las puertas de todo se cierran, y la de tu casa también, contigo dentro, y con suerte, con tu perro.

Estar en casa 24/7 es una novedad, y teletrabajo a parte, que aprovecho y desde aquí hago una llamada a los 4 gatos que me leen, que tengamos sentido de la responsabilidad, que las cosas hay que sacarlas adelante, pues para eso nos pagan, pero bueno, lo dicho, teletrabajo a parte, a lo que quiero llegar, es que de repente te das cuenta que tienes la tarde libre, y estás libremente encerrado entre 4 paredes.

Pues bien, en esta primera semana de encierro, que quien me conoce sabe que soy anti teléfono, anti skype, y puedo pasar una media de 2 años entre llamada y llamada para hablar con buenos amigos (si es que una relación tan intermitente entra en la definición de amigo), ya he hablado dos veces por videollamada con un grupo de 12 amigas de la uni, algunas que no veía desde hace 6 años, y me ha hecho muy feliz, ver que están bien, que nuestras vidas siguen adelante, desperdigadas por el mundo, y con nuevas aficiones, pero creo que con la misma esencia, al menos eso creo haber percibido, espero volver a hablar con ellas y seguir conociéndolas más.

Lo que quiero decir es que tenemos un enorme regalo ante nosotros, que es el tiempo, ya no tenemos excusas, vamos a aprovecharlo, pues es sin duda, creo que por ahora, una de las mejores oportunidades que nos brinda esta terrible pandemia, a parte de la reducción de la contaminación, un respiro para el planeta, y un respiro para nosotros. Este tiempo, más que nunca, es único e irrepetible, vamos a emplearlo en lo que queramos, vamos a pararnos a pensar, de qué me quejo que no tengo tiempo, y entonces buscar la manera de hacerlo, por ejemplo, yo suelo pensar que si tuviera más tiempo, escribiría más en el blog, y aquí estoy, disfrutando del teclado. Eso sí, si estabas pensando en escalar el Everest, bueno, vete entrenando en las escaleras de tu bloque, que ya irás más adelante.

Muchas gracias a todos los que están al pie del cañón, como son los sanitarios, policías, y demás profesionales, que contrariamente a los que estamos dentro de casa, están en las calles, velando por nuestra seguridad y arriesgando sus vidas por salvaguardar las nuestras, GRACIAS.

P.D. He escrito esto oyendo Simphony n.5 de Beethoven, dirigida por Bareinboim en el Royal Albert Hall, nos la ha recomendado mi padre hoy a mi hermana y a mi por whatsapp, gracias papi, me está encantando, ya estoy en parte de la n.6.

Volveré a escribir en estos días ; )